miércoles, 6 de marzo de 2013

Dime... ¿Qué quieres?



Hace mucho no escribía porque resulta que no  había estado tan molesta en mucho tiempo. Lo cierto es que estaba pensando en todas las veces que mis amigas me han contado lo engañadas o no informadas han sido alguna vez. Entonces  decidí escribirte a ti  porque necesito respuestas claras y concisas; necesito razones, necesito que aprendas a  decirlo en mi cara.

Tu primer error es creer que me quiero casar contigo *inserte sonido de que le quedan dos vidas*. Para comenzar debo decirte que esto será como tú quieras que sea. Un affaire de una noche, una semana de vacaciones, quince días de júbilo,  o un año sabático. Puedo  construirte un romance de tres meses, una relación de dos años o una vida entera. Sólo necesito que seas claro y que me digas lo que quieres, lo que esperas, lo que deseas de mí.

Y te pido perdón por la neurosis,  pero tengo tetas y soy mujer.  Yo necesito estar clara en mi vaina porque  no me manejo a oscuras y si me manejo, ocurre un accidente. Entonces,  necesito que me lo digas; bajito mañana en la mañana al oído. Entenderé si me dices un “me tengo que ir” mientras te veo con la camisa mal abotonada y los zapatos aún en la mano. Entenderé si dentro de tres meses me dices  “conocí a alguien y creo que es la adecuada”, comprenderé totalmente si luego de dos años me dices que estás aburrido y abrumado de  mi desorden.

Yo sé que no tienes las respuestas, que no sabes que quieres; que estás ahí simplemente con ganas impacientes de abalanzarte sobre mí y mis sábanas de 236598745698556 hilos. Entonces te esperas. Escuchas este sermón digno de una misa dominical de esas a las que mi mamá le encanta llevarme. Hoy no lo sabes, pero mañana sí lo sabrás, así que al despertar dime qué quieres y entonces en base a eso construiré mi vida misma.

Sólo te pido, por favor, por fitas, por los clavitos de  yissus, que no me mientas; que no me pidas algo que no quieres y  dime  lo que piensas aunque creas que me vaya a doler. No tengas miedo de mí; sé siempre sincero y claro porque lo que  no voy a perdonarte jamás es que me escribas  y el mismo día le aceptes la solicitud de  “comprometido con ” a Susanita en Facebook.

Porque al final lo que buscamos las mujeres no  es  amarrarte, sino sinceridad. Yo no quiero casarme contigo a los 20 minutos de conocerte, ni parirte 3 muchachos en 2 años. Quiero que quede claro que el peor error que puedes cometer es pensar que las mujeres somos algún tipo de depredador.  Entonces, ¿me vas a decir? ¿No? Entonces te me vas.

lunes, 20 de agosto de 2012

Si no te llama, no le gustas.

Hace aproximadamente 20 años que no veo a Pablo. Para ponerlos al corriente de la situación deben saber que Pablo  fue el primer chico que me gustó en el jardín de infancia. Cierta mañana mientras jugábamos a que él era Superman y yo la damisela en peligro en la torrecita de tubos del parque... le solté un ' te quiero' y acto seguido aquel niñito blanco de pecas, me empujo con toda su ira. Aún hoy me pregunto en qué fallé. 

Nosotras las mujeres tenemos una rara forma de protegernos a nosotras mismas: NOS MENTIMOS. Así como más tarde me dijo  una amiga "te empujó porque le gustas"; así mismo aceptamos y nos escondemos tras justificaciones tontas que en el fondo sabemos no sirven de nada.





"Qué si está super cansado", "Acaba de salir de una relación darks", "Lo traumó el divorcio de sus padres", "No quiere joder la amistad" o también escuché ésta (muy estúpida por cierto) " Creo que lo intimido porque le gusto mucho." Te suena familiar? Hay tantas excusas como trigo en un trigal, y lo que más me molesta de la situación es que simplemente nos hacemos las gallinitas ciegas. No sé que tan difícil puede ser aceptar cuando alguien no está interesado. Disculpen, pero eso se nota. No es que se sienta abrumado, no es que perdió tu dirección o se le borraron los contactos del pin...

Y sí es verdad, no importa la edad, credo, posición política y social; todas y cada una de nosotras ha justificado la desaparición así sin  son ni ton, del pana en cuestión. Un día todo estaba de las mil maravillas y al otro 'hora de hacer puff'. Entonces esperamos y desesperamos, y caemos en el dilema de llamar o no llamar; pasando por lapsus de  preocupación: " Le habrá pasado algo?", de superioridad: "¿y si piensa que él a mi ni me importa? " y de arrechera " %&%$&/". 

Entonces te tragas tu pelota de orgullo y llamas en busca de explicaciones, porque eso sí me lo tienes, valentía. Y entonces escuchas su voz ( en el más raro de los casos) con  esas divagaciones propias de quien le debe al turco y no quiere pagar " eh sí, he estado super ocupado",  " no, ando full con la tesis", " es que me voy del país", "Bueno sí perdóname, pero no eres tú, soy yo" y pare  usted de contar.

Y  para salir de este drama mental que me tiene la concha flaca, me leí el Best Seller ¿De verdad está loco por tí? el cual puntualiza que los hombres no son tan complicados como parecen, aunque les encanta que lo creamos. La verdad es que les da pánico decirle a una mujer  que no le gusta con palabras. Por eso lo grita con sus acciones. Por otro lado, si de verdad le gustas  no necesita tomárselo con calma, te lo dejará bien claro desde el principio. Te llamará, irá a buscarte, no apartará sus ojos- ni sus manos- de ti y estará encantado de hacer lo que sea por tí incluso después de 16 horas de trabajo.

Pablo fue sincero. No le gusté y esa fue su manera de demostrarlo. Es decir, cada quien envia señales de aceptación o rechazo y pueden ser leídas claramente. Así que la próxima vez  te guste alguien abre los ojos, entra en contacto  con esa persona y si no te llama no es porque perdió tu teléfono (en un porcentaje muy bajo  podría ser verdad, pero buscará la manera de contactarte si de verdad le gustas). Y cachetea a aquella amiga que te diga: " se sintió abrumado por tanta química".

                                                          XOXO




martes, 10 de julio de 2012

¡Ay! Hay un condón en tu cartera.

Así como lo leen en el título... Esa fue la frase que le escuché a mi mamá con esa cara de pocos amigos propias de asuntos desaprobados que todos conocemos en nuestros padres. Acto seguido, abrió el empaque  y me preguntó: ¿Tú me puedes explicar esto?- Respondí cagada, pero con aplomo (esa respuesta de jovencita de 16 que acaba de llegar de un paseo por Margarita patrocinado por Gusana Tours): "Mamá, es un preservativo  de muestra que repartieron en el viaje"... Sí, me creyó y es porque simplemente era la verdad. A esa edad ni planificaba, ni buscaba, ni pretendía encuentros del tercer tipo...  Un par de años después algún amigo me dijo "Tú pareces de esas chamas que tienen condones en su cartera". Sí bien el comentario fue un poco despectivo, yo lo sentí como un halago dado que  aunque desde el episodio anterior  no había tenido ninguno, a mi juicio, seria una excelente costumbre para  adoptar.

Encuentre la cajita aquí. *Foto real*
 ¿Cuantos de ustedes no ha tenido que parar la acción por no llevar protección? Levante la mano a ver o/...  Una vez me pasó y realmente deseé con todas mis fuerzas haber tenido uno.   ¿No sería genial que a pesar de haberlos olvidado, la chica con la que estén simplemente les diga: "tranquilo vale, yo aquí tengo uno"? Ah no, pero resulta que todos actúan como mi "amigo". Resulta que una mujer sí puede tener control de la natalidad,  pero no control de todo lo demás. Porque cuidarse no es sólo evitar la concepción, también es saber con quién te vas a la cama y en caso de estar conociendo es mejor ser precavida... pero en éste mundo machista si una mujer lleva condones en la cartera es una PUTA. ¿NO?

En una oportunidad  el que era mi novio para ese entonces me retó a entrar a una famosa farmacia donde venden de todo para comprar un paquetito, sin embargo, la pena me invadió y no lo hice... Posteriormente para una tarea no sólo entré, sino que pregunté  entre cuales podía elegir, los beneficios, las diferentes marcas y los precios. Me llevé una cajita de unos argentinos. MUY RECOMENDADOS.

 Bien pues, si me registras ahora mismo la cartera no encontrarás  tres, ni cuatro, pero sí encontrarás uno...  y es que hay un dicho que dice que mujer precavida vale por dos, pero personalmente opino que vale por mil. Así que ustedes chicas; lejos de criticar y señalar las invito y exhorto a adoptarlo como lo que es, una sana precaución. A los chicos; si tienen una novia que se ocupa de eso espero que las amen, las respeten  y les aplaudan la costumbre...

jueves, 7 de junio de 2012

Feos NO, que me enamoro.

      El ser humano se caracteriza por mantener siempre un patrón de conducta que, de alguna manera le hace pensar que es un método seguro de vivir,  repetir el patrón una y otra vez podría ser la razón por la cual la mayor parte del tiempo las relaciones interpersonales fallen.

      La mujer promedio siempre se inclinará a buscar un tipo de estos alfa, bellos y fornidos, pero inconstantes. Los hombres no menos torpes buscan a la  típica rubia buena, pero estúpida. La cuestión es que al cabo de un tiempo se verán en el mismo sitio donde comenzaron, buscando nuevamente esas características que no se adaptan a sus necesidades.



     Alguna vez salí un un tipo bello, bellísimo; no me lo podía creer de lo bello. Se parece a un famoso cantante de blues. No sé a ciencia cierta si  me gustó él, por ser él o porque se parecía físicamente a mi ideal. Aún así le eché bolas  al asunto, pero obviamente no era lo que esperaba. Pasado el tiempo planteé una teoría de que los hombres bellos son así. Es decir, no necesitan más... Se les ama por ser bellos y hay quien se conforma con eso. Para mí, un hombre debe tener un sin fin de accesorios y en resumidas cuentas ganarse el puesto y título de Amor de Mi Vida con ser y no con parecer.

      Un hombre que de verdad conquiste a una mujer no promedio, debe saber que es importante el uso del humor sin necesidad de usar el sarcasmo. Ser romántico sin empalagar, saber enseñar sin alardear y sobretodo ser sexy aún cuando sea más feo que una gandola por debajo.

      Y entonces, encontré a alguien no tan feo, pero aún así  reunía las cualidades antes mencionadas... "Te regalo esta vista al mar...(Y yo viendo el cerro lleno de ranchos a lo lejos),  al maRrrdito barrio"- Reí.  En otra oportunidad le pregunté si me quedaba bien un vestido y me respondió - " Se ve mejor encima del sofá"... y en algún momento me agradeció públicamente " gracias por decirme feo, pero sexy..." Y así descubrí que quizás no me gusten todos los feos, pero pensé que salir de la zona de confort  siempre nos dará otra perspectiva sobre nosotros mismos. Lo importante es tener claro lo que necesitamos y queremos de los demás y que estamos dispuestos a dar a cambio. 

jueves, 29 de marzo de 2012

No Seré Una Cuaima Más del Sistema.

Justo al colgar el teléfono decidí escribir hoy. He pensado un poco en las reacciones propias de las féminas  con respecto al control total de las situaciones, por no decir represiones. Miro a mi abuela; quien me cuenta que hace más de 50 años ella podía saber que mi abuelo tenía otra mujer y sin embargo,  la confortaba mucho saber que era quien llevaba el apellido y el anillo de casada. No, no quiero hablarles de cachos, de celos, ni de nada de eso. Hoy escribo sobre nuestra actitud ante las relaciones.

No quiero ser una CUAIMA BÁSICA.

Querido gremio femenino, desheredenme, no quiero ser una cuaima. Nunca he sentido la necesidad de revisar el teléfono de ninguno de mis novios, razón por la cual creo que tengo una alta probabilidad de alejarme de esos métodos destructivos con los cuales deseamos organizar todo lo que nos rodea. Opino que de cierta manera nos sometemos a un régimen  extremadamente inquisitivo que nos lleva a un desgaste físico y mental y no nos permite valorar y disfrutar de todo lo positivo que hay en nuestro noviazgo/matrimonio/arrejunte, peor aún los hace añicos.

 Entonces, estoy decidida a no preguntar quien es "esa", a no aprenderme las claves de cuentas personales aunque me las diga,  bajar los brazos de la cintura y cambiar el "nada" por la explicación real y ecuánime cuando me pregunte ¿qué te pasa?". Esa mala costumbre de utilizar el chantaje con el único fin de marcar un territorio, de exigir de manera retorcida atenciones que bien podríamos pedir. Deseo más que nada disfrutar  domingos de mala televisión nacional y besos en cada semáforo en rojo. Mirarle a los ojos y tener la certeza de que hay confianza como para hablar, discutir puntos de vista y sobretodo pasar la pagina.

No sé por que es tan complicado ser mujer, ni tampoco tengo la respuesta a nuestro intrincado método de orden y respeto. Les aseguro que las más cuaimas y celosas son las peores engañadas. Sin ánimos de alegrarme, lo merecen por locas.

 Hoy, definitivamente me cayó el 20 (como diría un mexicano), de que las mujeres perdemos mucho tratando de infundir una confianza y respeto donde ni siquiera hemos sembrado. Preferiría hablar, comunicar mi malestar  y obtener  una respuesta; no necesariamente la deseada. Sí, eso es lo que deseo para mi vida... ¿Y tú? 

domingo, 11 de marzo de 2012

No salgas con músicos.


Desde que tengo uso de razón, mejor dicho, desde que tengo la capacidad de fijarme en el sexo opuesto con fines de apareamiento; mi tierna y adorable madre me repite una y otra vez  una frase que  he  escuchado alrededor de un millón de veces "No salgas con músicos"


Mi padre fue músico en su juventud. Aún hoy guarda nexos con su  musa, su verdadero amor, la música. Cuando estaba pequeña no era raro que mi padre me llevara a algún ensayo de su grupo y entre teteros y cambios de pañales olvidados, mi madre de alguna manera afianzó el trío. Aún así, cuenta con aires melancólicos que no fue fácil establecer las prioridades, le costo mucho trabajo formar una familia.Y es por eso que quizás tenga temor de que yo me enamore perdidamente de un músico. Sin embargo, tengo mis propias opiniones.


  No salgas con un músico porque no serás su prioridad. Hagas lo que hagas y tengas el escote 36-C que tengas, nunca podrás igualar a su  amor. No salgas con un músico porque sus horarios serán meramente nocturnos, su ideal de cena romántica será pizza con cervezas (oh wait, ese es mi ideal de cena romántica). No salgas con un músico si no eres sensible a la sencillez, si no eres dada a los trasnochos; porque... se le acaba de ocurrir una melodía buenísima. No salgas con un músico porque generalmente anda a pie, es pelabola y se baña una vez al día. Disfruta pasar roncha. No salgas con un músico porque su manera de probarte que eres importante es tocarte algo en vez de recordar el aniversario. No, no salgas con un músico, porque posiblemente tendrá un harem de bellezas locas por él y sufrirás  más de un desaire. No salgas con un músico, pues para él primero que todo y antes que nada, está el éxito.


Sal con un músico porque su nivel de madurez  y sensibilidad es equivalente a las de un niño de 5 años moldeando dinosaurios en plastilina II. Sal con un músico porque te tocará como toca a su guitarra o te caerá a palo como a su batería ( no sugiere violencia la comparación)... Sal con un músico porque siempre buscará la manera de que exista armonía, de que sea bello, no perfecto, bello. Sal con un músico porque la monotonía no es parte de su diccionario y porque definitivamente hay pocas cosas en la vida que den tanta satisfacción así como ver demasiada vehemencia  en un solo ser. Sal con un músico porque la música no siempre estará para él y tú, al menos lo estarás cuando desees. Ama a un músico por la noche y escápate de él al salir el sol...

   Mi madre tiene razón... Ahí está ella, tiene 27 años casada con mi papá y la "otra".  Hasta ahora he sido fiel a los consejos de mi madre... Una vez salí con un fotógrafo que ejecutaba muy bien la guitarra o quizás era un guitarrista que tomaba buenas fotos ¿?.

lunes, 27 de febrero de 2012

Ser mujer no es pecado. PECADO es no disfrutarlo - Prólogo-


  ¿Qué es  una mujer? Una excelente interrogante para comenzar un libro que trata sobre nosotras. Sin embargo, yo misma no sé a ciencia cierta como definirnos.


  Hoy, que las mujeres no temen adoptar  "roles masculinos" y que  no es extraño que un hombre se quede en casa cuidando los niños ¿hay necesidad de definirlos? ¿Existe una necesidad de diferenciarlos?

 Cierto porcentaje social opina que ambos géneros estamos en igualdad de condiciones, pero mi pregunta real es: ¿somos iguales? Es cierto, he visto mujeres con botas de seguridad y casco, trabajando como obreras en la zona industrial, no conforme con eso mi madre sabe arreglar licuadoras, secadores, aires acondicionados, lámparas y cambiar cauchos. Aún así sigue en pie mi interrogante: ¿somos iguales? Y aunque  a más de uno le gustaría responder de manera afirmativa, la realidad simple y pura es que no, no somos iguales. ( Explique. Valor 5 puntos).

 A las mujeres nos es difícil desempeñar estos roles propios del hombre, por tanto, debemos cuidar  no cometer el mínimo error. Razón por la cual aumentan las exigencias. No se nos permite demostraciones emotivas...es decir, es necesario que actuemos como hombres en su campo laboral. No podemos dar menos que ellos.
   

Desde mi punto de vista las mujeres hemos conquistado terreno en el ámbito profesional, sin embargo, hemos dejado de lado otras facetas.Y lo que en un principio fue considerado como La Liberación Femenina, se convirtió poco a poco en nuestra nueva jaula. De la casa y los quehaceres, pasamos a la oficina, a la calle; de los teteros a las compras. Espero que me comprendan, no es que me guste más la manera en que vivieron nuestras abuelas, sino que por querer escapar de una realidad que nos encarcelaba, pasamos a ser parte de otra que terminó por encerrarnos igual.


  Y entonces ¿Qué es ser mujer?
   

Ahora mismo más que nunca, es una pregunta introspectiva para cada una de nosotras. Toda mujer, como tal, tiene una forma de expresar, decir, sentir, hacer y pensar; ya sea por las hormonas, la luna, los años o un fin mayor a nosotras mismas. Hoy tenemos la dicha de elegir y preguntarnos: ¿qué nos alienta?¿qué anhelamos? ¿qué estamos dispuestas  a dar por nuestros sueños?


  Podemos romper el molde de imagen, de lo que esperan los demás de nosotras. Porque en el pasado no fue bien visto que desearas estudiar antes que formar una familia, hoy pasa exactamente lo contrario. Entonces ¿cuál es la diferencia?¿qué nos define? ¿nos define ser arquitectos? ¿saber hacer pollo a la naranja? ¿tener cuatro hijos? ¿un par de zapatos Manolo Blahnik?

  Ser mujer querida; va más allá de un par de tetas, tacones y rubor melocotón. Es demostrar lo arrechas que podemos ser más allá de los roles que nos toquen desempeñar, nuestra manera de mantener el balance y de ver el mundo. 

  Si la tan deseada igualdad me lleva a convertirme en quien no soy y en quien no quisiera ser. La igualdad para mi no sería más que una simple utopía. Es necesario saber que ya logramos lo más importante; que se escuchara nuestra voz dulce, fina y femenina. 


   En la actualidad las mujeres trabajan, administran, votan y gobiernan. Usan pantalones y hasta les queda mejor. La prioridad es otra,  ahora debemos encontrar el equilibrio entre nosotras y el mundo; entre lo que debemos hacer y lo que queremos. Ser honestas y respetarnos por quienes somos.

 Ser mujer no es pecado. Pecado es no disfrutarlo.

 A mi madre Carmencita Regnault 
A mis amigas Francis Lachea y María V Guevara <3